La multinacional BMG se está haciendo con los derechos de un buen puñado de artistas y bandas legendarios, lo que ha facilitado que en los últimos años estemos viendo reeditados gran número de álbumes históricos (e incluso discografías enteras) repletas de extras y golosinas. Y como quiera que el Pisuerga pasa por Valladolid, el 60º aniversario de The Kinks como banda viene acompañado del lanzamiento en dos partes de “The Journey”, amplio recopilatorio que recorre la carrera de la genial banda británica y del que ya ha visto la luz el primer volumen (a lo largo del año se editará el segundo).
Seguro que muchos opinarán que a estas alturas poco puede aportar una antología de la banda de los hermanos Davies, por muy completa que esta sea y por mucho que nos digan que los temas han sido remasterizados a partir de las cintas originales. Y aunque tal vez el aspecto gráfico sea un tanto espartano (al menos en la edición en formato CD, que es la que nosotros hemos recibido), lo interesante aquí es que todos los temas han sido seleccionadas por Ray Davies, Dave Davies y Mick Avory y agrupados por temas de largo título, muy en la tradición de la banda (a saber: “Songs about becoming a man, the search for adventure, finding an identity and a girl”, “Songs of ambition achieved, bitter taste of success, loss of friends, the past comes back and bites you in the backside”, “Days and nights of a lost soul, songs of regret and reflection of happier times” y “A new start, a new love, but have you really changed? Still haunted by the quest and the girl”). Además, cada canción viene con breves notas explicativas recientes a cargo de los tres músicos, lo que le otorga un plus a este lanzamiento.
Se trata de un total de 36 cortes (alguno menos en formato LP) del periodo comprendido entre los años 1964 y 1975 que, como puede imaginarse el lector, además de recorrer la primera década y algo de carrera discográfica de la banda, recoge también un buen puñado de clásicos de la historia no solo de la música popular británica, sino del rock mundial. Una buena excusa para los fans completistas o simplemente para aquellos que quieran introducirse en la música de The Kinks.