Años… qué digos años, décadas se ha pasado John Fogerty a la greña con los que fueron miembros de Creedence Clearwater Revival, pero tras lustros y lustros de litigios y malos rollos, por fin el compositor ha logrado hacerse con los derechos de publicación a nivel mundial de las composiciones que creó para la banda, según ha informado Billboard en su edición online.
Fogerty adquirió recientemente de manos de Concord, que los poseía desde que en 2004 compró Fantasy records, una participación mayoritaria en dichos derechos por un montante que no ha sido revelado. Movimiento que sin duda sorprende ya que en los últimos tiempos estamos asistiendo a la venta de ese mismo tipo de derechos de muchos de los grandes de la música a conglomerados multinacionales que probablemente los explotarán extensivamente durante los próximos años. El acuerdo supone que Concord mantendrá sin embargo en su poder los másters de las grabaciones.
Lógicamente Fogerty se ha mostrado extremadamente feliz por un acuerdo que le ha llevado toda una vida: “Soy el padre. Yo las creé. En primer lugar, nunca deberían habérmelas quitado. Y ese secuestro dejó un agujero enorme en mí”.
Pues nos alegramos.