En el momento de escribir este texto, Rex Brown está temporalmente fuera de la “reunión” de Pantera por motivos de salud (el bajista reveló en las redes sociales oficiales del grupo que tiene covid y que ha preferido mantenerse alejado de sus compañeros y del equipo de gira para evitar poner en peligro las fechas inmediatas de la banda). Un hecho que en un primer momento fue objeto de especulaciones no muy halagüeñas para un tour que desde que se anunció ha contado con una oposición frontal por parte de muchos seguidores.
Resulta paradójico que mientras la familia de los hermanos Abbott ha dado su bendición a esta aventura (aunque puntualizando, eso sí, que no se trata de una reunión cuando faltan dos de sus miembros), muchos indignaditos de las redes no tengan otra cosa mejor que hacer que echar pestes desde la comodidad de su dispositivo Android. Y la cosa en verdad resulta muy fácil: nadie obliga a ir a ver a estos “Pantera”, así que el que no esté contento se puede quedar en su puta casa.
Por otro lado, todo este asunto me parece una total falta de respeto hacia Charlie Benante y Zakk Wylde. Y más teniendo en cuenta que después de que hayamos podido ver en los últimos días vídeos de las primeras actuaciones, está claro que no solo son más que capaces de realizar la tarea con éxito, sino que lo hacen desde el más profundo respeto hacia Dimebag y Vinnie Paul, que además eran amigos personales de ambos. Reconozco que personalmente no tenía ninguna fe en Zakk Wylde porque… bueno, su estilo tiene una serie de ticks de los que no parecía poder apartarse, pero después de ver cómo se las gasta me he tenido que comer mis palabras. Como me dijo el otro día un redactor honorario de esta web, GOR, “Zakk no suena a sí mismo, lo cual ya me parece un logro”.
Pero las redes han seguido recibiendo comentarios de presuntos fans ofendidos a los que les molesta profundamente que esto se llame Pantera o vaya usted a saber qué. Como si Brown y Phil Anselmo estuvieran engañando a la gente para vender más entradas o algo. Obviamente no es la situación más deseable, pero a menos que queráis que giren con un par de hologramas no sé qué coño esperáis. Es doloroso que esto no ocurriese en vida de Vinnie Paul (y por la misma regla de tres entonces tampoco habría sido una reunión como tal), pero así es la vida y no hay más.
Es obvio que Pantera es una banda especial: no habido nadie que sonase como ellos ni antes ni después, aunque su sombra se puede ver acechando en la música de muchos grupos posteriores. Es también evidente que su música marcó una época y pasó a la historia del metal por derecho propio, y eso no lo pueden negar ni sus detractores (que también los tienen). Por eso es entendible que haya gente que no se sienta cómoda con esta gira. Toda una lástima porque no sabemos lo que va a durar todo el asunto y no va a haber más oportunidades de escuchar esta música en vivo. Pero allá cada cual con sus códigos morales.
Foto: Facebook Pantera
