Como ya comenté hace unos días, la escasa oferta que de momento ofrece la plataforma de contenidos audiovisuales de Amazon permite que se preste atención a productos que tal vez nos habrían pasado desapercibidos. Este es el caso, al menos para servidor, de “I Love Dick”, una serie basada en protagonizada por Kevin Bacon y Kathryn Hahn y basada en la obra del mismo título de Chris Kraus.
Considerado ese libro -una mezcla de autobiografía, ficción y ensayo-, como una de las obras feministas más importantes de las últimas décadas, la serie parece dejar un poco de lado ese aspecto más reivindicativo para mostrarnos a una Hahn –Chris Kraus– totalmente colgada como una adolescente de Dick -Kevin Bacon-, un importante artista que sin embargo lleva una década sin crear ninguna obra importante, pero cuyo carisma y presencia sexual resultan irresistibles para la primera. En el juego entrará en un primer momento el marido de Chris, Sylvère Lotringer, papel a cargo de un Griffin Dune que hace de cornudo (o aspirante a) consciente y que gracias al morbo de la situación ve revitalizada su pobre relación sexual con su esposa, aunque posteriormente se sentirá humillado cuando el affaire se airee. Entre medio algunas tramas paralelas que muestran la complejidad de las relaciones, el esnobismo del mundo del arte y la doble moral que impera en la sociedad actual.
Algunos capítulos resultan un poco peñazo, pero la serie en líneas generales tiene su punto.
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