Bryde – Madrid (Costello Club 18-5-2018)

3.9/5 - (20 votos)

Cerrando lo que ha sido su gira europea, que la ha llevado por numerosos puntos de la geografía del viejo continente, Bryde se presentaba en la capital del reino en un recinto propenso a la simbiosis con el público, sobre todo teniendo en cuenta ese carácter íntimo que la de la pérfida albión imprime a su cancionero.

La aparente fragilidad que presenta Bryde se muestra completamente a través de sus composiciones en estudio, pero en directo, quizás impulsada por la visceralidad de sus dos acompañantes, se torna mucho más poderosa.

Su folk pop intimista se vuelve folk rock, con momentos en el que el alternativismo más ruidoso toma los mandos de la velada, haciendo que Bryde abandone su zona de confort y navegue por aguas más turbulentas.

Consciente de ello, Bryde retorna de cuando en vez al remanso ofreciendo alguna de sus composiciones interpretadas únicamente con su voz acompañada de guitarra, para poder volver de nuevo a ese estado emocional donde se encuentra su universo interior, como hizo con “Steady Heart” en la zona central del concierto.

Principalmente repasó temas de lo que es su álbum de debut, “Like An Island“, aunque también sacó del tintero temas de sus dos anteriores epes, destacando de éstos últimos la espectacular y visceral “Wouldn’t That Make You Feel Good?“.

Saltó a las tablas de nuevo una vez concluido el concierto, para cerrar acompañada únicamente con su guitarra con “Transparent“.

El torrente emocional que muestra Bryde, anclado en estructuras folk con aderezos del alternativismo más rockero, donde planea su particular voz y sus melodías vocales, que por momentos nos dejan regusto a Patti Smith, Joni Mitchell, o incluso Tori Amos, sin olvidar al tótem del índie británico, PJ Harvey, nos muestra de dónde bebe Sarah Howells, aunque realmente Bryde consigue disipar esos fantasmas inmediatamente y transportarnos a ese lugar que ha construido para dar cabida a su propuesta musical.

Concierto corto, de apenas una hora de duración, aunque intenso emocional y musicalmente, motivado quizás por la todavía corta, por el momento, mochila compositiva de Bryde, que supo meterse en el bolsillo a base de cercanía a los allí congregados.

Apuntaremos en la agenda la próxima visita de una artista que seguramente no volvamos a ver en salas de pequeño aforo. Hagan lo propio si quieren disfrutar de alguien diferente.

[amazon_link asins=’B079F7WT82,B01LW49V8K’ template=’ProductCarousel’ store=’rockandrollar-21′ marketplace=’ES’ link_id=’15f4a8ff-5cbd-11e8-86ff-65e6a06583db’]

Comentarios

Comentarios