Resulta irónico: durante años se especuló con la existencia de unas cintas de The Hellacopters destinadas para un eventual disco en directo, algo que el propio Nicke Andersson llegó a corroborar (si no me falla la memoria incluso en entrevista con este mismo magazine). Y sin embargo ha tenido que ser Imperial State Electric, ese proyecto más modesto del señor Royale -en cuanto a repercusión popular, se entiende-, el que haya acabado lanzando un majestuoso doble álbum en directo.
De todas formas hay que reconocer que los fans tenemos muy mala baba. Son ya cinco álbumes y alrededor de ocho años de carrera los que llevan ISE y tadavía no se han podido desprender de esa etiqueta de “banda del fundador de…”. Y tal vez los méritos de este grupo palidezcan ante los conseguidos por los anteriores, pero no deja de ser algo injusto que todavía a estas alturas estemos midiéndoles por un rasero que no les corresponde. Entre otras cosas porque este momento tal vez sea menos propicio para cualquier banda de rock que mediados-finales de los años 90 del pasado siglo.
Pero todo esto son discusiones estériles, por lo que nos centraremos ya en hablar de “Anywhere Loud”, disco que salió al mercado hace casi dos semanas ya. Para todos aquellos que hayan visto las últimas giras del grupo, el contenido del álbum no albergará ninguna sorpresa puesto que recoge el repertorio estándar que el grupo ofreció en la última de sus visitas a nuestro país, incluyendo esos guiños a bandas como Black Sabbath, Lynyrd Skynyrd o las versiones de The Kids y Dead Boys.
Grabado en las ciudades de Madrid, Tokyo y Estocolmo, lo bueno de este disco es que ISE no han sido rácanos: 23 son los cortes que aquí se incluyen, lo que significa un completo repaso a la discografía de la banda de principio a fin. Las mezclas de Ola Ersfjord (Wolf, Dead Lord, Horisont) son también dignas de mención, habiendo logrado recrear el sonido de la banda en vivo a la perfección. Eso sí, el sonido ambiente del público hay momentos que parece haber sido pegado de mala manera (esos gritos de “Tobias” procedentes de la descarga de Madrid suenan bastante postizos, aunque podría estar equivocado).
Pero lo que sí es “Anywhere Loud” es un perfecto testimonio de lo que es esta banda en directo. O al menos de lo que fue en esa última gira hasta el momento. Una banda ligeramente diferente de lo que demuestra en sus álbumes de estudio. Personalmente solo me convence al cien por cien de su discografía su primer álbum; del resto rescato canciones sueltas, por lo que me resulta difícil disfrutar de ellos al completo. Sin embargo en vivo la cosa es diferente, ya que la banda es capaz de ofrecer conciertos tal vez no increíbles, pero sí de un altísimo nivel y muy disfrutables para cualquier amante del rock. Y esto, ni más ni menos, es lo que refleja este doble directo. Si ya les diera por rescatar más temas de su debut o al menos “Alive” la experiencia podría convertirse en orgásmica.