La extensa banda malagueña Jammin’ Dose nos presenta su nuevo trabajo discográfico, un disco de diez canciones que lleva por título “Deadline” y que sucede a su EP de 2013 “Fake Town”.
Curtidos a base de patearse las carreteras y los escenarios, Jammin’ Dose suenan en “Deadline” como una banda realmente compacta en la que la variedad que despliegan no puede ocultar la gran compenetración que ha alcanzado el conjunto. Suenan impecables, pero además de la técnica casi se puede intuir la diversión que deben experimentar al tocar todos juntos.
Siguiendo mayoritariamente sonidos de inspiración negra, Jammin’ Dose también se acercan al rock de toda la vida, logrando una mezcla que hace de este disco un producto muy atractivo para todo tipo de público. Básicamente porque saben cómo sonar accesibles, pero sin que por ello se resientan unas composiciones que, como por ejemplo “Glory Hole” o la más contundente “The Hater”, tienen madera suficiente para convertirse en un auténtico pelotazo en las listas.
Resumiendo, que si a una banda rodada le añadimos unas canciones bien construidas y con un atractivo polivalente, capaz tanto de contentar al erudito como de llamar la atención del oyente ocasional, lo único que podemos añadir es que estamos ante un brillante y equilibrado resultado.
