La pasada semana se ha conocido el título del nuevo disco de Queens of the Stone Age y su fecha de edición. Será en el mes de junio, concretamente el día 25, cuando llegue “…Like Clockwork”, el primer álbum de los de Josh Homme desde que en el año 2007 se editara “Era Vulgaris”. Será también el primer disco que la banda lance con Matador, el legendario sello independiente. Sabemos que en el disco colaboran Sir Elton John y Dave Grohl, en la web de la banda pueden escucharse en el momento de redactar estas líneas algunos fragmentos y también aparece una ilustración (la misma que acompaña a este artículo) que bien podría ser parte del artwork definitivo del álbum. Aparte de esto poco más sabemos, aunque desde luego los fans de la banda ya se encuentran con los dientes largos.
Personalmente siempre he considerado a Queens of the Stone Age un grupo más de canciones que de álbumes: en todos sus discos encontramos algunos temas muy potentes, pero el balance general para mí siempre ha sido algo tibio. Incluso guardo bastante más cariño por un disco como el errático y homónimo debut de la banda que por cualquier otro de su carrera, aunque soy consicente de que los hay mejores. Y en directo a mí me han dado una de cal y otra de arena: la primera vez me pareció un concierto de un nivel inalcanzable para cualquiera de sus contemporáneos, mientras que el segundo me pareció un coñazo insoportable, con Homme haciendo gala de una actitud bastante cargante.
Quien sabe, tal vez se pueda permitir semejantes comportamientos. Al fin y al cabo QOTSA es una de las bandas de Rock actuales más exitosas (también hay que decir que eso no es muy difícil) y el muy cabrón ha compartido grupo con el batería de Nirvana y el bajista de Led Zeppelin. Y tal vez algún día concentre todo su potencial y entregue un disco verdaderamente legendario (y sé que sus fans no estarán de acuerdo conmigo porque para ellos seguramente ya lo ha conseguido). No lo sabemos, pero al menos es bueno tener a QOTSA de vuelta en un momento en el que el Rock necesita desesperadamente volver a ser verdaderamente popular.