No cabe duda que Mike Ness y los suyos se han hecho esperar lo suyo para entregar nuevo álbum. Su última referencia, el colosal “Sex, Love & Rock and Roll” fue editado hace la friolera de ocho años (acojona cómo pasa el tiempo, sí) y lo cierto es que, lo que es discográficamente, el listón estaba rematadamente alto.
En una declaraciones realizadas hace algún tiempo, Ness afirmaba que el disco iba a sonar a medio camino entre los Dead Boys y The Black Crowes, y lo cierto es que algo de eso podemos encontrar en “Hard Times And Nursery Rhymes”, no exactamente, pero sí en esencia, en la pretensión de aunar el Punk Rock old school del que siempre ha hecho gala la banda con referentes más setenteros, más classys.
El disco abre con un corte instrumental, “Road Zombie” al que sigue una de las revelaciones del álbum, “California (Hustle and Flow)”, efectivamente, aquí hay clasicismo a raudales, un riff eminentemente Stoniano y los coros femeninos de rigor, un corte definitivamente más cerca de Humble Pie que de los Clash, y una grata sorpresa. A partir de aquí, y si me lo permiten, podemos dividir el repertorio en dos categorías: Por un lado encontramos canciones claramente continuistas con respecto a la senda iniciada en “Sex, Love and Rock and Roll”, de potentes melodías y sólidos guitarrazos y por otro, temas a los que, partiendo de la misma fórmula, le añaden la dosis justa de Rock clásico.
En la primera división podríamos incluir cortes como “Gimme The Sweet Lowdown”, “Diamond In The Rough” o “Machine Gun Blues” que para nada habrían desentonado en la anterior entrega de la banda. También el guiño que le hacen a Hank Williams marcándose su “Alone and Forsaken”, o esa cima del disco que responde al título de “Still Alive”. “I Won’t Run No More”, con la que echan el cierre, también estaría ahí. Representando la otra categoría tenemos el soberbio medio tiempo “Bakersfield”, “Far Side of Nowhere” (¿Su “Dead Flowers”?) , los deliciosos pianos que acompañan “Writing on the Wall”, la vacilona “Can’t Take With You” o “Take Care of Yourself”. Como ven, se trata de un balance casi perfectamente equilibrado.
Bueno, desgranado el álbum y llegados a este punto, abordemos las conclusiones: “Hard Times And Nursery Rhymes” no llega al nivel de “Sex, Love and Rock n’ Roll”, pero ya sabemos que eso era una tarea casi imposible, además de no ser lo que aquí se dirime. Estamos ante un gran disco, clásico, poderoso, y lleno de grandes temas (yo aún diría más, no le sobra ninguno) y que nos trae de vuelta a unos Social Distortion perfectamente engrasados y de una pieza (en todos los sentidos) que, hasta la fecha, están teniendo un siglo XXI jalonado de grandes entregas discográficas. Qué no decaiga.