Resistance Tour 2010 – Auditorio Oeste (Argentina)

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Termina el 2010, y en el comienzo del nuevo año, nos encontramos ante una de las mejores grillas de recitales de rock, que la Argentina ha armado en mucho tiempo. Sinceramente una selección exquisita de seis bandas que desparramaron lo mejor de sí, sobre los dos escenarios del Resistance Tour 2010.
Antes de comenzar la música, vale la pena destacar los stands de Stencils, Aerografia, Tattoos y Merchandising, junto a las Skate Ramps, que le pusieron mucha adrenalina y color a lo vendría en unos instantes.
Auditorio Oeste fue el lugar encargado de acobijar a éstas  más de 2000 almas que (acobijadas por un calor intolerante) deambulaban la Zona Oeste del Gran Buenos Aires en busca de algo que sacie sus peticiones.
El show arrancó pasadas las seis de la tarde con Léxico. Los locales repasaron lo mejor de su discografía (“Lo Siento…” y “Los Ángeles Mienten Mejor”), a puro sonido de punk californiano, donde su versión de “Mrs Brightside” de The Killers fue lo más destacado de su performance.
Lo que siguió fue uno de esos momentos que realmente da placer disfrutar. Tras años y años de circular por todo el mundo del rock argentino, encontrar dos bandas nacidas en las más profundas entrañas del Underground, que suenen tan profesionalmente, y que a su vez sean tan aclamadas por su público, causa sinceramente una enorme satisfacción.
Deny, quizá el mayor exponente del screamo argentino (género que aquí no es muy bien recibido), desató un enorme pogo (de esos dignos de integrar), acunado por lo mejor de “La Distancia” (2009), su único disco de estudio. Temas como “Quebrando Promesas” y “Ahogándome”, lograron que a uno se le erizara la piel.
Por su parte, Jordan se encargó de cerrar el escenario alternativo, regalando lo mejor de su placa “La Pura Percepción”, disco que causó una enorme revelación en el 2008 (cabe aclarar que ya anunciaron que en Marzo del corriente año saldría a la venta “Hablando Con El Universo”, su nuevo material).
Hay que asincerarse y reconocer que el set list que incluyó canciones del tipo de “Ambición”, “Alas” y “Otra Desilusión”, fue el mejor que podrían haber selecto, donde cientos de adolescentes eufóricos no se cansaron de corear hasta la explosión interna.
El turno de Shaila. Quizá el momento más emotivo de la noche. La banda de hardcore melódico  que mejor supo entender lo que es bajar un mensaje de conciencia a la gente (ya sea político, ecológico o social). Reivindicando a Eduardo Galeano o al “Che” Guevara; o criticando el sistema machista, y la autodestrucción del hombre, para con la naturaleza. Shaila siempre estuvo al pie del cañón.
Rondando las ocho de la noche, el cover de Ska-P: “Mis Colegas”, le dio inicio a su repertorio. Tras “La Historia Somnoliente de América Latina”, la sorpresa que nadie se esperaba. Yasser, guitarrista de la banda disparó: “Éste es un recital especial para el grupo. Shaila va a parar por un buen tiempo. Así que disfruten de éste último recital”. A más de uno la noticia lo dejó perplejo. Una banda en pleno ascenso. Tras un año muy fructífero. Pero aparentemente las cosas no estarían funcionando de la mejor manera. “La Meta” fue el tema que siguió a dicho anuncio. Casi como una señal; hablando de un proceso cumplido. El resto se vivió en un clima algo triste. “Sudamérica II, El Fracaso Regional”, “Cuando No quieras Sentir” (uno de los temas con mayor carga emotiva), “Eva” (con Joaquín Guillén, cantante, criticando constantemente al mundo patriarcal en que vivimos, y diciendo: “El hombre no va a ser menos hombre por lavar los platos”), “Incendio Global”, “No Soy Rock” (“No nos gusta lo que hoy en día llaman como ROCK. Si eso es ROCK, les aviso que yo no soy ROCK, papi”), “Los Farsantes” (para todos los “políticamente correctos”) y despidiéndose con un doloroso: “Nos vemos cuando nos tengamos que ver, y cuando tenga que ser”. Así, la banda dejó sus últimos acordes sobre el escenario, de la mano del tema “Mañanas”, casi como plantando una bandera, pero sin resignar nunca la lucha.
A ésta altura hay que admitir que Carajo ya no sorprende. Y hay que tomar ésta frase en el mejor sentido de la misma. Debemos estar ante la presencia del grupo argentino que mejor suena en vivo. Siempre preocupados por hacer que sus espectadores reciban el mejor shows de sus vidas, el power trío saltó al escenario en medio de la intro con la que arranca su nueva placa de estudio: “El Mar De Las Almas”. “Ácido” (primer corte de difusión de dicho disco) enloqueció hasta el último de los que disfrutábamos desde abajo. “Luna Herida” (con Corvata, cantante y bajista, vomitando dolor en cada estrofa), “Una Nueva Batalla” y “Libres” (“Para toda la banda metalera del Oeste”) completaron su primer set. “Ahora vamos a tocar un tema viejo. A ver si se acuerdan”, fueron las irónicas palabras que el vocalista eligió para presentar “El Error” (uno de los himnos del grupo, a ésta altura de su trayectoria). “Ironía” (siempre acompañada por el devastador medley de Pantera), “Joder”, “Chico Granada”, “Sacáte La Mierda” (el tema más esperado de la noche) y “El Vago”, fueron las canciones que los nûmetaleros seleccionaron para detonar todo Auditorio Oeste, y dejar mansos a todos los que esperaban por Attaque 77.
Es cierto que con la partida de la banda de Ciro Pertusi, el grupo punk perdió un alto grado de valoración. De hecho, la última placa del grupo: “Estallar” (la única como trío), es de lo más flojo en toda su carrera. Pero arriba del escenario siguen teniendo ese “algo” que los hace especiales. Quizá ya no deslumbran. Pero Tan solo con un buen manojo de canciones, hicieron que lo que tenían planeado saliera a pedir de boca. Incluyendo temas muy viejos como “Combate”, “Armas Blancas”, “¿Cuál Es El Precio?” y “Héroe De Nadie”, la gente se encendió sin prejuicios. Llegando al final, hubo un momento para festejar la actual condena (aunque un poco tardía) a los militares genocidas que encabezaron la última dictadura militar en Argentina, entre los años 1976 y 1983; en la cual 30.000 personas fueron asesinadas. Aquí, Mariano Martinez (guitarra y voz) alzó su puño al aire y dio comienzo a “Memoria”, en modo de repudio a dichos asesinos.
Una noche perfecta que se festejó de comienzo a fin. Y dejó a todos expectantes, de cara al próximo Resistance Tour 2011.

 

Por Alejandro Nuñez (desde Argentina)
 

Termina el 2010, y en el comienzo del nuevo año, nos encontramos ante una de las mejores grillas de recitales de rock, que la Argentina ha armado en mucho tiempo. Sinceramente una selección exquisita de seis bandas que desparramaron lo mejor de sí, sobre los dos escenarios del Resistance Tour 2010.Antes de comenzar la música, vale la pena destacar los stands de Stencils, Aerografia, Tattoos y Merchandising, junto a las Skate Ramps, que le pusieron mucha adrenalina y color a lo vendría en unos instantes.Auditorio Oeste fue el lugar encargado de acobijar a éstas  más de 2000 almas que (acobijadas por un calor intolerante) deambulaban la Zona Oeste del Gran Buenos Aires en busca de algo que sacie sus peticiones.El show arrancó pasadas las seis de la tarde con Léxico. Los locales repasaron lo mejor de su discografía (“Lo Siento…” y “Los Ángeles Mienten Mejor”), a puro sonido de punk californiano, donde su versión de “Mrs Brightside” de The Killers fue lo más destacado de su performance.Lo que siguió fue uno de esos momentos que realmente da placer disfrutar. Tras años y años de circular por todo el mundo del rock argentino, encontrar dos bandas nacidas en las más profundas entrañas del Underground, que suenen tan profesionalmente, y que a su vez sean tan aclamadas por su público, causa sinceramente una enorme satisfacción.Deny, quizá el mayor exponente del screamo argentino (género que aquí no es muy bien recibido), desató un enorme pogo (de esos dignos de integrar), acunado por lo mejor de “La Distancia” (2009), su único disco de estudio. Temas como “Quebrando Promesas” y “Ahogándome”, lograron que a uno se le erizara la piel.Por su parte, Jordan se encargó de cerrar el escenario alternativo, regalando lo mejor de su placa “La Pura Percepción”, disco que causó una enorme revelación en el 2008 (cabe aclarar que ya anunciaron que en Marzo del corriente año saldría a la venta “Hablando Con El Universo”, su nuevo material).Hay que asincerarse y reconocer que el set list que incluyó canciones del tipo de “Ambición”, “Alas” y “Otra Desilusión”, fue el mejor que podrían haber selecto, donde cientos de adolescentes eufóricos no se cansaron de corear hasta la explosión interna.El turno de Shaila. Quizá el momento más emotivo de la noche. La banda de hardcore melódico  que mejor supo entender lo que es bajar un mensaje de conciencia a la gente (ya sea político, ecológico o social). Reivindicando a Eduardo Galeano o al “Che” Guevara; o criticando el sistema machista, y la autodestrucción del hombre, para con la naturaleza. Shaila siempre estuvo al pie del cañón.Rondando las ocho de la noche, el cover de Ska-P: “Mis Colegas”, le dio inicio a su repertorio. Tras “La Historia Somnoliente de América Latina”, la sorpresa que nadie se esperaba. Yasser, guitarrista de la banda disparó: “Éste es un recital especial para el grupo. Shaila va a parar por un buen tiempo. Así que disfruten de éste último recital”. A más de uno la noticia lo dejó perplejo. Una banda en pleno ascenso. Tras un año muy fructífero. Pero aparentemente las cosas no estarían funcionando de la mejor manera. “La Meta” fue el tema que siguió a dicho anuncio. Casi como una señal; hablando de un proceso cumplido. El resto se vivió en un clima algo triste. “Sudamérica II, El Fracaso Regional”, “Cuando No quieras Sentir” (uno de los temas con mayor carga emotiva), “Eva” (con Joaquín Guillén, cantante, criticando constantemente al mundo patriarcal en que vivimos, y diciendo: “El hombre no va a ser menos hombre por lavar los platos”), “Incendio Global”, “No Soy Rock” (“No nos gusta lo que hoy en día llaman como ROCK. Si eso es ROCK, les aviso que yo no soy ROCK, papi”), “Los Farsantes” (para todos los “políticamente correctos”) y despidiéndose con un doloroso: “Nos vemos cuando nos tengamos que ver, y cuando tenga que ser”. Así, la banda dejó sus últimos acordes sobre el escenario, de la mano del tema “Mañanas”, casi como plantando una bandera, pero sin resignar nunca la lucha.A ésta altura hay que admitir que Carajo ya no sorprende. Y hay que tomar ésta frase en el mejor sentido de la misma. Debemos estar ante la presencia del grupo argentino que mejor suena en vivo. Siempre preocupados por hacer que sus espectadores reciban el mejor shows de sus vidas, el power trío saltó al escenario en medio de la intro con la que arranca su nueva placa de estudio: “El Mar De Las Almas”. “Ácido” (primer corte de difusión de dicho disco) enloqueció hasta el último de los que disfrutábamos desde abajo. “Luna Herida” (con Corvata, cantante y bajista, vomitando dolor en cada estrofa), “Una Nueva Batalla” y “Libres” (“Para toda la banda metalera del Oeste”) completaron su primer set. “Ahora vamos a tocar un tema viejo. A ver si se acuerdan”, fueron las irónicas palabras que el vocalista eligió para presentar “El Error” (uno de los himnos del grupo, a ésta altura de su trayectoria). “Ironía” (siempre acompañada por el devastador medley de Pantera), “Joder”, “Chico Granada”, “Sacáte La Mierda” (el tema más esperado de la noche) y “El Vago”, fueron las canciones que los nûmetaleros seleccionaron para detonar todo Auditorio Oeste, y dejar mansos a todos los que esperaban por Attaque 77.Es cierto que con la partida de la banda de Ciro Pertusi, el grupo punk perdió un alto grado de valoración. De hecho, la última placa del grupo: “Estallar” (la única como trío), es de lo más flojo en toda su carrera. Pero arriba del escenario siguen teniendo ese “algo” que los hace especiales. Quizá ya no deslumbran. Pero Tan solo con un buen manojo de canciones, hicieron que lo que tenían planeado saliera a pedir de boca. Incluyendo temas muy viejos como “Combate”, “Armas Blancas”, “¿Cuál Es El Precio?” y “Héroe De Nadie”, la gente se encendió sin prejuicios. Llegando al final, hubo un momento para festejar la actual condena (aunque un poco tardía) a los militares genocidas que encabezaron la última dictadura militar en Argentina, entre los años 1976 y 1983; en la cual 30.000 personas fueron asesinadas. Aquí, Mariano Martinez (guitarra y voz) alzó su puño al aire y dio comienzo a “Memoria”, en modo de repudio a dichos asesinos.Una noche perfecta que se festejó de comienzo a fin. Y dejó a todos expectantes, de cara al próximo Resistance Tour 2011.   Por Alejandro Nuñez (desde Argentina)   

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