A pesar de parecer una broma relacionada con las fechas en las que estamos (Semana Santa y el April’s Fools Day anglosajón), todos los medios han recogido estos días de atrás una noticia bastante turbadora: Michael Jackson resucitó durante diez minutos.
Los datos que han salido ahora a la luz, y que el padre de Jackson ha anunciado que utilizará en la acusación contra el galeno personal del cantante Conrad Murray, son que una hora después de que su pulso se parara, los médicos lograron que el corazón del Rey del Pop volviera a latir. Eso sí, latía de una forma tan débil que el equipo médico acabo perdiendo a Jackson para siempre. Según Joe Jackson, este hecho prueba suficientemente la neglicencia médica de Murray, aparte de todo el asunto del suministro de calmantes. El padre de Jackson, que ha presentado un informe de trece páginas ante las autoridades policiales, ha declarado además “deberían encerrarle y tirar la llave”. Mucho nos tememos que seguirá saliendo a la luz más basura sobre el caso durante años.
