Habría que preguntarse si Eagles of Death Metal habrían alcanzado su estatus en el underground (porque no nos engañemos, todavía no han pasado de ahí a pesar de que su música haya protagonizado anuncios de importantes marcas deportivas) si uno de sus componentes no fuera el omnipresente Joshua Homme. Uno, que según dicen algunos suele tener muy mala baba, opina que no. Aparte de algunas canciones con gancho, videoclips divertidos y un sonido muy personal (esto sí lo reconozco), la banda no ha pasado de ofrecer discos de una calidad bastante irregular en conjunto, con algunos grandes temas pero también con auténticos peñazos.
Y este “Heart On”, su tercer álbum de estudio, probablemente sea el más irregular de todos. Aparte de ciertos toques a lo Rolling Stones en algunos temas (que personalmente no había detectado en anteriores entregas) hay poca novedad en el sonido de la banda. El disco además carece de singles con gancho como lo fueran “I want You So Hard” o “I Only Want You” en sus anteriores trabajos. Tal vez el inicial “Anything ‘cept the Truth” podría ser considerado como el tema destinado a ese papel en este disco, aunque sin llegar al mismo nivel que los anteriormente citados.
A partir de aquí el disco mantiene el nivel en los primeros temas, sobre todo “Wannabe in L.A.” y “(I Used to Couldn’t Dance) Tight Pants”, pero va lentamente perdiendo fuelle según avanzan las canciones. Como decía, nada nuevo en los discos de Eagles of Death Metal, pero en esta ocasión resulta más dramático al no encontrarnos con ningún tema verdaderemente rompedor. Definitivamente su disco más flojo hasta la fecha.