Amigos, fratellos del rockandroll, el bizarrismo y la sal gorda, en esta ocasión acudo a vuestros infieles corazones para hablaros de una de esas aficiones no confesables en círculos de lo que se considera hoy en día sociedad normal.
Visto que vuelven las pin ups y que las Suicide Girls parecen casi haberse convertido en iconos de la modernidad retro, hoy vamos a echar un ojo a las estrellas del Striptease primigenio o lo que fue el burlesque en sus tiempos de ocaso.
El burlesque nace a mediados del XlX en Estados Unidos, como variante o copia del cancan francés, que para las mentes norteamericanas era un baile picanton no falto de de glamour, cuando todos sabemos aquello era carne de puterío… cosas de los yankees, pero eso es otro tema. Cómo género alternativo teatral, la sátira social y el humor de trazo grueso eran su bandera. Números musicales, cómicos tullidos y letras de canciones con dobles sentidos sobre temas picantones eran el plato habitual de estos espectáculos, además de chicas ataviadas con vaporosos pero castos ropajes.
Hasta el cine sonoro, este género vivió una verdadera época de oro, que fue derivando cada vez más hacia caminos más explícitos, menos artísticos y cada vez menos desprovistos de barreras visuales, es decir striptease, nudies y bizarrismo, y en cada uno de estos subgéneros surgirían estrellas del género, que hasta los años 50 y con la posterior pérdida de la inocencia social, se mantendrían en la pomada, para después desaparecer para siempre. Hasta nuestra década, tan falta de nuevas ideas y amiga de lo retro. Y cómo no, yo, encantado.
Por ser un género underground en los tiempos fundacionales rockeros, me parare sobre todo en las que fueron estrellas del Burlesque y el Nudie de los 50, hablar de esto es sin duda hablar del gran mito, Betty Page, que por tópica resulta aburrida ya, así que empezare por otra de mis favoritas, Tempest Storm.
Esta mujer que fue pareja en Teasorama de Betty page, es una de las leyendas de la época de oro del striptease primigenio. Tempest, que empezó como corista, pronto fue fichada por un cazatalentos de Pin Ups por su gran pechonalidad. Musa, cómo no, de Russ Meyer, fue relacionada con el mismísimo JFK, Sammy Davis Jr. o Elvis. Esta mujer que estuvo sobre los escenarios hasta los 65, actualmente se deja ver aun en festivales de rockabilly, ¡vaya con la señora!
En los tiempos en los que onanistas hacían de Marilyn objeto de deseo, Dixie Evans era la versión más trash de Norma Jean. Dixie Evans, que casi parecía un clon de Marilyn, era la encargada de emular el cuerpo desnudo de esta en las giras de burlesque que se hacían por todo el medio oeste yankee. Buena pieza esta mujer también, discípula de Gypsy Rose Lee en este viejo arte del despelote itinerante, fuera de todos los cánones WASP esta morenaza fue la primera actriz verdaderamente conocida del burlesque.
Iker Casillas ha asegurado sus manos en no sé cuantos millones de euros, parece ser que todos nos sorprendemos, pero el hecho es que otra de estas pioneras del despelote, ya intentó hace cincuenta años asegurar sus tetas en el Lloyd de Londres por 50.000 Dólares. Evelyn West fue desde entonces conocida como "El tesoro de 50.000 dólares en el pecho". Vean las fotos y juzguen.
Durante la guerra los soldaditos algo tenían que mirar para encontrarle sentido a la guerra, ni la libertad ni la democracia son razones reales para empuñar un fusil. Sin embargo, unas tetas grandes, lo son. Quizás fue por ello Jennie Lee una de las pin ups, más populares del fatídico lustro de la segunda guerra mundial. Esta señorita campeona en cría de sandias, fue la que adornaba la postal más vendida en tiempos de guerra, incluso llegó a tener un club de fans. Su carrera se vio truncada sin embargo por una paradójica muerte, un cáncer de pecho.
Los 40's por la guerra y los 50's por la afición popular al pulp, fueron campo abonado para estos géneros de mala muerte. Sin embargo, con la entrada en la dorada época de los 60, el gusto por artes más finos y en general el cambio de mentalidad así como una apertura en cuanto a la censura, marcan el ocaso del género.
El burlesque provocador ya no tenía mucho sentido: el que quería carne, la tendría y sin ningún tapujo. Sin embargo, pequeños reductos sobrevivieron en el tiempo, directores como Russ Meyer o chicas como Tura Satana o en los 70's Roberta Pedon representaban al género con cierta dignidad.
Hoy, desprovisto de caspa y mas como espectáculo para gafapastas, podremos encontrar varios teatros de burlesque en NY, así que, aprovechando que el dólar está barato…
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