Olvidad que este hombre decidió un día abrir las puertas de su casa a las cámaras de la todopoderosa MTV. Olvidad todo lo que hayais visto en ese programucho. Olvidad la aparente senilidad de Ozzy. Olvidad a sus malcriados hijos. Olvidad que el Príncipe de la Oscuridad, el mismo que decapitaba murciélagos o esnifaba hormigas junto a un desconcertado Nikki Sixx se nos mostró humano alguna vez.
Quizás demasiado humano…
Es lo que tuve que hacer yo al escuchar este disco, porque una vez empieza a sonar la voz de Ozzy vemos que es el mismo de siempre. A pesar del barniz modernillo del que se han dotado los temas (supongo que el público tipo del Ozzfest tendrá algo que ver en esto), tenemos que quitarnos el sombrero.
Evidentemente no estamos hablando de una obra maestra. Ni siquiera podemos decir que “Black Rain” sea uno de los mejores discos del madman. Pero como en todos ellos encontramos al menos un puñado de temas dignos de entrar a renovar un poco el set list de directo de Ozzy. Hay un par de temas en concreto que me tienen obsesionado: “I Don’t Wanna Stop” y “The Almighty Dollar” son dos futuros clásicos, estoy convencido de ello. “Lay Your World on Me” es también un tema destacable, el típico tema lento que tiene que haber en un disco de Ozzy con una marcada línea de bajo un tanto atípica.
Hay otros temas, pero esos son los que más me obsesionan ahora mismo. Aviso: la primera vez que escuché este disco me pareció una mierda. Gana mucho con las escuchas.
[amazon_link asins=’B00MC4NN6U,B004RQVVFQ,B000066SNV’ template=’ProductCarousel’ store=’rockandrollar-21′ marketplace=’ES’ link_id=’6164c497-bd95-11e7-b3e4-cda105e9e066′]
